El ánade rabudo (Anas acuta), también conocido como pato rabilongo, es una de las especies de anátidas más elegantes que podemos observar en humedales y zonas costeras durante los meses de invierno. Su cuello largo, silueta estilizada y plumas de la cola alargadas lo convierten en una especie muy atractiva para los amantes de la observación de aves.
Aunque se reproduce mayoritariamente en el norte de Eurasia y muy ocasionalmente en el sur de España, durante el invierno realiza una migración hacia zonas húmedas más templadas. En Galicia, y concretamente en el entorno de A Mariña Lucense, se puede detectar en enclaves tranquilos como la ría de Foz, la charca de Rinlo, o pequeñas lagunas costeras con escasa perturbación humana.
Si estás planificando una escapada de birdwatching, este pato puede ser una de las sorpresas invernales de tu lista de especies. Consulta nuestra guía completa para observar aves en A Mariña Lucense para organizar tu experiencia.
Cómo es el ánade rabudo y dónde verlo en Galicia
El ánade rabudo es fácilmente reconocible por su perfil esbelto y su larga cola afilada. Los machos en plumaje nupcial lucen una cabeza marrón achocolatada con una delgada línea blanca que conecta con el pecho blanco, mientras que el dorso muestra tonos grisáceos finamente rayados. Las hembras, aunque menos llamativas, tienen un aspecto alargado, moteado en tonos marrón claro, y una silueta distinguible gracias a sus largas plumas centrales.
Durante el invierno, muchos machos adoptan el plumaje de eclipse, más parecido al de las hembras, lo que puede dificultar su identificación para observadores noveles.
En Galicia, aunque no es abundante, puede avistarse entre noviembre y febrero, especialmente en zonas húmedas costeras. Se alimenta en aguas poco profundas y también busca alimento vegetal en campos y orillas, lo que lo hace relativamente visible a poca distancia.
Hábitats donde buscarlo en A Mariña Lucense:
- Ría de Foz: ideal para limícolas y anátidas invernantes.
- Charca de Rinlo: zona con poca presión humana, perfecta para observación tranquila.
- Humedales costeros de Barreiros: potenciales puntos de descanso para ejemplares migratorios.
📌 Sugerencia: Si estás por la zona, lleva prismáticos en tus paseos matinales por la costa. No es raro encontrar a esta especie descansando en compañía de otras anátidas como el ánade real o el silbón europeo.
Comportamiento y amenazas del ánade rabudo
El ánade rabudo es un pato principalmente invernante en la Península Ibérica. En Galicia no se reproduce, pero sí visita nuestras costas y humedales durante los meses fríos, especialmente entre noviembre y febrero, antes de emprender su regreso hacia el norte de Europa.
Se alimenta tanto de vegetación acuática como de pequeños invertebrados, y su cuello excepcionalmente largo le permite sumergirse hasta 30 centímetros sin necesidad de bucear completamente. Esto le otorga ventaja sobre otras anátidas en zonas poco profundas.
En cuanto a comportamiento social, es una especie gregaria que suele verse en pequeños grupos, a veces asociado a otras especies como ánades reales, cercetas o silbones. Son relativamente confiados, pero sensibles a ruidos o movimientos bruscos.
Principales amenazas
- Pérdida y alteración de humedales: la presión urbanística y agrícola reduce su hábitat invernal.
- Caza ilegal o descontrolada: aunque está protegida, sigue siendo víctima de disparos en algunas zonas.
- Contaminación por plomo: restos de perdigones siguen afectando su salud en áreas húmedas.
- Perturbación humana: la presencia constante de personas en sus áreas de descanso puede reducir su éxito de alimentación y aumentar el estrés.
Por todo ello, el ánade rabudo está clasificado como «En Peligro» en España en cuanto a población reproductora, aunque su presencia como invernante sigue siendo estable en muchos puntos del país.
¿Dónde observarlo con seguridad?
Observar al ánade rabudo en Galicia requiere paciencia, conocimiento de los humedales adecuados y respeto por el entorno. En A Mariña Lucense, lo ideal es explorar zonas poco frecuentadas durante las primeras horas del día o al atardecer.
Consejos para su observación:
- Camina en silencio, sin realizar movimientos bruscos.
- Utiliza prismáticos o telescopios desde cierta distancia para no molestar al grupo.
- Evita acercarte directamente al agua o cruzar campos si ves aves posadas.
- Lleva ropa neutra y mantente inmóvil al acercarte a una zona de descanso.
- Consulta previamente las mareas si visitas áreas intermareales como Foz o Rinlo.
Si te interesa saber qué otras aves puedes encontrar durante tu escapada ornitológica, consulta nuestra guía completa de observación de aves en A Mariña Lucense, donde encontrarás rutas, zonas ZEPA y consejos para cada época del año.
Foto vía: amarinalucense.gal